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DescubrirPor Marida con Alhambra
La pasta y su devenir histórico sigue fascinando a los historiadores por su origen incierto, no exento de leyendas y mitos. Lo que nadie pone en duda son sus múltiples cualidades, convertida en todo un símbolo de la cocina de Italia, donde no es solo un ingrediente más, es todo un arte y parte de su cultura. Es fácil adivinar por qué se ha extendido por todo el mundo, con variedades tan puramente italianas como los espaguetis, pero capaces de sorprender con nuestras recetas que abrazan la fusión de sabores, como en esta con mejillones y salsa de curry.
Los seductores spaghetti, con su perfección rectilínea en seco, que se transforman en un conjunto de infinitas y resbaladizas tiras cilíndricas una vez cocidos en el plato, son sin duda una de las pastas más populares del mundo. Tienen la virtud de ser un plato a la vez humilde y refinado, hogareño o digno de las mejores mesas.
Pero la pasta no es nada sin su pareja de baile, una salsa que aporte sabor y potencie su textura, que complete la experiencia gastronómica de la misma manera que lo hace el maridaje perfecto. Cuando se da esa conjunción idónea de elementos en la mesa es cuando percibimos esa magia de las pequeñas cosas. Porque detrás de un plato de pasta hay siglos de historia y tradición, la misma pasión y atención al detalle que ponen los maestros cerveceros de Cervezas Alhambra en cada una de sus elaboraciones, cuidando con mimo cada ingrediente, cada paso del proceso.
Inmortalizados en la gran pantalla en numerosas ocasiones, los espaguetis son un ejemplo muy representativo de la versatilidad de la pasta. Porque, aunque recetas como la boloñesa o la carbonara no saben de modas, los mejores chefs saben aprovechar ese carácter de lienzo en blanco que permite desarrollar nuestra creatividad gastronómica.
Aplicando la misma fórmula de la que hace gala Cervezas Alhambra, con el máximo respeto a la materia prima y explorando las posibilidades culinarias de toda su gama para invitarnos a paladear y sentir cada momento con calma, podemos sorprender con sabores exóticos que, a pesar de todo, saben también muy nuestros.
Las vibrantes especias de curry que definen la riqueza de la cocina india llegaron a Europa quizá de la mano de los mismos comerciantes que expandieron las primitivas pastas asiáticas. Con este sugerente plato nos permitimos soñar un poco y viajar a través de los sentidos, dejando que el sabor marino de los mejillones nos conecte también con esos recuerdos familiares de días de verano y tapeo. Alhambra Reserva Esencia Citra IPA, equilibrada y refrescante, convertirá la degustación en toda una fiesta para el paladar.
Comenzamos lavando bien los mejillones con agua, frotando las conchas y retirando las barbas. Los reservamos y limpiamos también las verduras. Picamos finamente las cebolletas y los dientes de ajo pelados. En un recipiente aparte, rallamos los tomates desechando la piel.
Llenamos una olla grande con abundante agua salada y la ponemos al fuego a calentar, dejando que coja temperatura hasta que entre en ebullición antes de cocer los espaguetis.
Mientras tanto, cubrimos el fondo de una cazuela ancha con aceite de oliva virgen extra y lo calentamos suavemente. Añadimos las cebolletas y los ajos con una pizca de sal, y dejamos pochar hasta que estén tiernos.
Incorporamos el tomate rallado y la hoja de laurel, removiendo suavemente. Agregamos ahora la leche de coco, el zumo colado de las limas y las especias de curry. Salpimentamos generosamente y removemos para que todo se incorpore homogéneamente.
Entonces subimos el fuego y añadimos los mejillones, mezclamos para que se combinen con la salsa y tapamos la cazuela. Bajamos el fuego, dejando una cocción suave mientras se abren los mejillones, lo que nos llevará unos cinco minutos.
Aprovechamos para cocer los espaguetis en el agua, que ya debería estar hirviendo con alegría. Los dejamos cocer solo hasta que estén al dente, siguiendo las indicaciones del paquete, y los escurrimos rápidamente.
Los repartimos en platos o colocamos en una fuente grande, y añadimos por encima la salsa de mejillones y curry.
Finalizamos decorando con cilantro picado al gusto, y un buen golpe de pimienta negra recién molida.
Esta receta, de alma simple pero muy rica en aromas y texturas, estimulará aún más nuestros sentidos acompañada de una Alhambra Reserva Esencia Citra IPA. Esta cerveza monovarietal, siguiendo el estilo de las Indian Pale Ale americanas, demuestra cómo a veces lo más sencillo puede regalar experiencias inolvidables y complejas, gracias a la atención y cuidado por hasta el más mínimo detalle.
Elaborada con el único lúpulo americano Citra, responsable del inconfundible estilo IPA, este selecto ingrediente aporta a la cerveza un ligero amargor en perfecto equilibrio con su intenso aroma fresco a frutas cítricas y notas más tropicales.
Así, los aromas del lúpulo complementan el sabor especiado de la salsa de curry, a la vez que el amargor de la cerveza ejerce un efecto de contraste con el dulzor del mejillón. Además, por su contenido alcohólico y carbonatación, unidos a esa moderada intensidad amarga, la cerveza también nos aporta un efecto de limpieza de paladar, invitando a probar otro bocado.
Si comentábamos que una de las virtudes de la pasta es su versatilidad, podemos tomar esta receta de espaguetis con mejillones al curry para explorar otros sabores, incluso otras gastronomías, usando especias marroquíes como el Ras el hanout, o, yéndonos al otro lado del planeta, con una mezcla cajún.
Podemos potenciar el lado más picantón del plato añadiendo a la salsa guindilla fresca cortada en rodajas finas, o sustituir las especias de curry amarillo por una mezcla de curry de Madrás, de intenso color rojo y mucho más picante, que quedará perfectamente equilibrado con los aromas frescos de Alhambra Reserva Esencia Citra IPA.
También se puede variar la receta utilizando langostinos, gambas o gambones, en lugar de mejillones, cociéndolos o salteándolos aparte antes de incorporarlos a la sabrosa salsa. Y si se prefiere un plato más reconfortante, se puede enriquecer el plato con caldo de pescado para elaborar una especie de sopa marinera al estilo del ramen japonés, coronado con semillas de sésamo tostado.
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