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clearFecha
23/02—27/02 2022
Localización
IFEMA—Feria de Madrid
Un año más, el VI Premio Cervezas Alhambra Arte Emergente convoca a los mejores artistas emergentes del ámbito nacional. Conoce las cinco obras finalistas que aunan arte y artesanía con un nexo común: La ciudad de Granada y la Alhambra, dos elementos inherentes a nuestro origen, como fuente de inspiración.
ZÓCALO
Laia Estruch
Se han utilizado materiales lo mas fiel posible a los originales utilizados en la Alhambra. Siendo por ello todos yesos y pigmentos naturales, sin químicos. Trabajando artesanalmente junto al Maestro estuquista Luis Prieto en su taller de Madrid. Uno de los últimos estuquistas que quedan conocedor de las técnicas tradicionales del uso de estucados y yeserías, así como los materiales naturales y su uso.
Fuentesal Arenillas inician su investigación a partir de un olivo milagroso situado en el cerro de San Miguel Alto de la Granada musulmana, sus varas florecían al amanecer, y al ponerse el sol sus frutos ya habían madurado.En Albor se unen madera y aceite gracias al trabajo de Pedro Barea, urdimbre y trama gracias a las manos de Francisco Rubio, e historia y magia que hacen de este proyecto parte de su leyenda.
En sus proyectos se aproxima al objeto escultórico como si se tratara de un espacio escénico, donde desplegar una investigación corporal y sonora basada en la experimentación vocal. En Zócalo, ha colaborado con el artesano Eloi Bonadona para crear una estructura de cerámica cilíndrica, basada en la tradición alfarera local del pueblo de Quart, en Girona, que recuerda a un instrumento de viento y que parte de las cubiertas horadadas y abovedadas de los baños del Palacio de Comares, en la Alhambra. La escultura Zócalo será activada con una performance realizada en directo.
“Y cuando la costura de los siete cielos se quebró́, éstos comenzaron a girar como si su sustancia y su cuerpo fueran transparentes, dejando traslucir lo que más allá́de ellos había. Las miradas percibieron las estrellas de la octava esfera, y las imaginaron en el cielo más próximo.” Ibn Arabi. La cosmología árabe dibuja un hilo conductor tendido entre los infinitos grados del ser -las estrellas, los elementos naturales, los cuerpos- que conecta a todos ellos. Como un eco interno constante que une todo en permanente e íntima conexión. Esta idea es la que comparte el artista, que trata de fundir en esta obra cielo y agua.
Dos volúmenes de vidrio que ha soplado Igor Obeso (Irún). Dos cabezas. Una da y la otra recibe. Parece que lo que intercambian es una ganancia acuática del pensamiento. La artista dibujó un verso del poeta Ibn Zamrak (1333-1393) para sacarlo de su contexto: “Es un amante cuyos párpados rebosan de lágrimas, lágrimas que esconde por miedo a un delator”. La diferencia entre palabra y escrito es fundamental, la palabra siempre se mueve.