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Recetas
Por María José Amengual
Según dicen los entendidos, es la salsa quien espera a la pasta, así que para triunfar preparando un plato como este deberemos tener clara cuál es la secuencia más acertada para conseguir el mejor resultado. Que después la pasta nos guste al dente o más hecha ya es cuestión del gusto personal de cada uno.
Las reuniones de verano, con familiares o amigos, se prestan a elaborar platos ricos y sorprendentes, pero que no impliquen demasiado trabajo, y precisamente esta receta de pasta con carbonara de aguacate es justo eso: una propuesta sorprendente y sabrosa que se prepara en cuestión de minutos.
Cocinar esta receta es tan sencillo que resulta ideal para implicar a los más pequeños de la casa, que disfrutarán ayudándonos a conseguir el mejor resultado. De la misma forma que Cervezas Alhambra hace gala del máximo respeto a la materia prima para conseguir unas variedades de cerveza de lo más especiales y nos invita a paladear y sentir cada momento con calma, llevar esos valores a la cocina es sencillo si se parte de unos ingredientes de 10.
Con este plato inspirado en una receta tradicional italiana, viajaremos a través de los sabores. ¿Y acaso no es Italia un destino siempre apetecible?
En una cacerola amplia, ponemos un litro y medio de agua y un buen puñado de sal. Cocemos la pasta a nuestro gusto.
Mientras se cuece la pasta, doramos el bacon cortado en tiras. Lo retiramos de la sartén y reservamos la grasa que haya soltado.
En la misma sartén, con la grasa del bacon, doramos un diente de ajo muy picado y después agregamos la pasta muy bien escurrida, removiendo el conjunto.
En un vaso de batidora, ponemos la pulpa del aguacate, el queso parmesano y un cucharón del agua de cocer la pasta. Procesamos con la batidora hasta que quede una crema homogénea. Repartimos la pasta en platos hondos, la cubrimos con la salsa carbonara de aguacate y decoramos con bacon y queso rallado.
Esta receta es perfecta para disfrutar de una comida relajada sin pasar mucho tiempo en la cocina dando forma a elaboraciones complicadas. Como es tan sencilla de preparar no es necesario organizarse con demasiada antelación, de esta forma, el aguacate se conservará mejor y evitaremos que se ennegrezca.
Para maridar, nada como una Alhambra Reserva Roja: con ella conseguiremos un equilibrio de sabores: el cereal, los ahumados y los tostados del plato contrastarán con los tostados de la cerveza, pues esta variedad, potente y voluptuosa, invita a saborear su complejidad en un primer trago intenso, tras el que aparecen sabores de caramelo y grano y se potencian los afrutados.
Sin duda, la salsa carbonara es una de las más famosas del recetario italiano. Cremosa, suave y con personalidad, eleva a la máxima potencia cualquier pasta con la que se sirva, por eso es la salsa más popular, pero también la más customizada, como nuestra receta, en la que hemos usado aguacate.
Sobre su origen hay diversas historias. Una de las más conocidas sitúa su nacimiento en el norte de Italia, donde se da una importante actividad minera. Allí, los carboneros solían comer la pasta con panceta, queso y huevo que debía tomarse rápido para que no se cuajase este último. Se explicaría así también su nombre, por los carboneros que fueron los primeros en prepararla, y por el uso de la pimienta negra, que simbolizaría las salpicaduras de carbón.
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